En un artículo anterior, titulado «los políticos cantan para llegar al corazón de su audiencia«, se explica la importancia de romper el protocolo y las formalidades, esporádicamente, en los actos públicos donde la comunidad participa activamente con su líder político. Esto produce algunos efectos favorables en la percepción sobre la imagen de la figura pública o, si fuere el caso, del candidato electoral.
Una de las maneras más efectiva es involucrarse emocionalmente con los espectadores por medio de la expresión artística del canto, que atrae a las multitudes sobrepasando ideologías, colores y religiones. En este particular, el presidente norteamericano Barack Obama ha sabido explotar muy bien sus talentos musicales, tanto así, que en muchas convenciones del partido Demócrata, en sus anuncios de reelección presidencial o en diversos espectáculos realizados en la Casablanca, él no ha desperdiciado la oportunidad de pararse en el estrado para cantar algunas frases, solo o junto con estrellas musicales de talla mundial, donde la audiencia, presente y la televisiva, ha podido percatarse de su excelente, firme y afinado timbre de voz. Como se ha mencionado en el artículo anterior, presidentes como Obama y el venezolano Chávez, entre otros, utilizan esta herramienta de acercamiento al público para afianzar su imagen entre sus seguidores y posibles indecisos, para ponerse al mismo nivel que su audiencia y generar confianza y empatía.
Por otro lado, el equipo publicitario de campaña de Obama ha tomado ventaja de la falta de talento, en este campo artístico, de su contrincante político Mitt Romney, cuya voz cantada ha sido tomada de otro contexto y superpuesta en un spot electoral, como fondo musical, que la resalta de manera desastrosa, desafinada y temblorosa. Este canto acompaña imágenes de un comportamiento indecoroso diseñadas bajo un estilo infográfico.
Dicho spot, titulado «Firms», fue producido evidentemente como propaganda negativa la cual se trató de suavizar con la muestra de aprobación inicial del mismo presidente. Lo que se pretende es ridiculizar al candidato Republicano Mitt Romney, porque sin mencionarse una sola palabra o comentario por parte del equipo publicitario de Barack Obama, aquél trata de enaltecer a su país cantando una canción patriótica, mientras las imágenes revelan los supuestos negocios que tiene fuera de Norteamérica, que le producen excelentes dividendos económicos; y al escuchar la melodía junto con la imagen se crea un efecto perceptivo que lo hace parecer como un cínico, burlón y descarado durante toda la secuencia. Es causar la sensación de que nadie se está metiendo con el candidato Romney, sino que él mismo se hace daño con su comportamiento inapropiado y, quizás, desquiciado al no darse cuenta de su pésima y ridícula manera de cantar, tal vez tratando de imitar al presidente Obama para ganar la simpatía del electorado.
Se muestra un extracto del presidente Obama cantando algunas frases de blues durante un espectáculo en la Casablanca.
Se muestra el spot electoral televisivo llamado «Firms» – «Empresas»